Trabajar con los Ángeles: Paso Seis

6. Repite los decretos y las oraciones


Las oraciones y los decretos son más eficaces cuando los repites. Muchos protestantes evitan recitar las oraciones más de una vez pues afirman que se trata de la vana repetición contra la que advirtió Jesús (Mateo 6:7). «Al fin y al cabo—cuestionan—¿por qué habría de pedir una cosa a Dios más de una vez?» Los católicos y las iglesias ortodoxas orientales practican la repetición del Padrenuestro, el Avemaría y otras oraciones. Los místicos judíos repetían los nombres de Dios. A juicio de algunos místicos, la repetición es ciertamente orar «sin cesar» (1 Tesalonicenses 5:17).

La razón por la cual es más eficaz repetir una oración es que cada vez que la recitas estás ofreciendo más energía en forma de luz a Dios y a los ángeles, quienes pueden utilizarla como semilla, a la vez que van añadiendo más energía mientras se ocupan de dar respuesta a tu petición.

Así pues, escoge unas cuantas oraciones y decretos y recítalos cada día hasta que los ángeles respondan.